¿La vida? Una mierda. Todo es un asco, es verdad. Siempre hay algo malo en todo lo que hacemos, siempre nos podemos quejar de alguna cosa.
Para ser artista de verdad, tienes que defender esta idea.
¿Qué clase de bohemio es aquel que dice ser feliz? Pero si en realidad todo es un complot contra nosotros... Los de arriba nos controlan, en realidad nada tiene remedio ya.
La sociedad es una mierda. Todo da asco. No hay nada que tenga sentido, ni salvación. Que ni se te pase por la cabeza la idea de que en este mundo se puede llegar a una mejora, o que el ser humano pueda hacer cosas buenas. En el fondo, todo está mal.
Dios no existe. Por supuesto que no. Eso es de ingenuos, porque todo es fruto de la ciencia y nada más. Un Dios que fomenta un espíritu gentil y solidario con los demás no puede seguir vivo en esta sociedad. Nadie sabe de dónde viene ni a dónde va, pero es que tampoco le interesa mucho saberlo. (¿Para qué?).
Lo que de verdad inspira es la tristeza, la sensación de rechazo hacia los demás y la melancolía de un pasado que, sin duda, fue mejor. Claro que sí, porque la felicidad es una sensación falsa que en realidad no existe. Por no hablar del amor verdadero. Eso es un mito.

¿Y si de repente entre todo esto sale alguien que opina lo contrario?