Pero cada vez entiendo menos este sistema educativo (valga la redundancia) del que nos hacen, supuestamente, partícipes y beneficiarios a nosotros, pobres alumnos indefensos a los que, entre la masa de burros pasivos que van al colegio por no tener nada mejor que hacer, nos gustaría aprender algo de verdad para formarnos como personas.
Un tema tratado miles y miles de veces, éste. Pero no puedo comprenderlo, no me cabe en la mente.
Si se defiende una educación libre, que lo lleven a cabo. Si se busca el crecimiento intelectual del alumno, que apliquen este principio, maldita sea, que lo apliquen de verdad. A principio de curso me di cuenta, mediante unos tests (no por esto menos estúpidos) según los cuales mi nivel intelectual no estaba muy por encima de la media general de mi edad. De hecho, era más bien mediocre, cosa que no tiene demasiado que ver con mis resultados académicos (no pretendo nada en concreto). ¿Conclusión? Lo único que nos hacen ejercitar en estos 12 años de nuestra vida encerrados en este edificio definido como "lugar al que acudes para adquirir culturismo" es la memoria.
Memorizar datos, datos, datos, datos, datos y más datos. Memoriza, no te olvides de esto, de esto y de lo otro, aunque no tenga nada que ver con el tema, da igual. Es importante y si te olvidas te quito dos puntos.
Da igual que sepas relacionar razonadamente todos los argumentos que utilizas para explicar una idea. Da igual que sepas coordinar las ideas de manera lógica y coherente. Da exactamente igual que pienses con la cabeza, se te han olvidado datos.
No digo que no sea necesario memorizar ciertas cosas, vale, es necesario tener cierta base teórica para poder pensar en base a los conocimientos adquiridos. Pero espera, que por una vez que nos dejan libre albedrío para expresar nuestra capacidad intelectual de manera razonada, no vayas a poner más de 150 palabras, chico, que esto se sale de los esquemas.
¿Cómo son capaces de reducir la literatura española del siglo XX a tres autores que ni siquiera son los más representativos de la misma? ¿Cómo es posible que simplifiquen toda la historia de la filosofía en cuatro autores de mierda, que si quieres uno no te lo estudias, y si te preguntan algo que no tiene que ver no sepas contestar? ¿Cómo puede ser, de verdad, que permitan estas cosas?
En fin, si quieres hacer más fácil la tarea del alumno, no te limites a reducir la materia a cuatro contenidos que hay que saberse de memoria pura. Si quieres, no sé, sé un poco más benévolo a la hora de corregir, valora más la capacidad de síntesis y relación de la persona...
En fin, me produce tristeza y frustración. Todo lo que hemos aprendido durante nuestros 12 años de estudio se reduce a un examen, para el cual estudiamos como locos, memorizando datos sin sentido, sin comprenderlos en absoluto, y sólo por pasar el examen. No importa si luego no te acuerdas de nada, que te vas de fieshta una semana y te olvidas de lo que has estudiado, y de lo que has hecho la noche anterior también, de paso. Si total, ¿Para qué?
Crecer culturalmente, ¿eso qué es?
la verdad es que es cierto que se basa todo en memorizar, aunque al ser de letras igual tu lo sufres mas xD
ResponderEliminarpor ejemplo, en matematicas en bachillerato te enseñan a derivar y a partir de ahi tienes que ser capaz de derivar cualquier funcion con las reglas que te dan. o sea, no saber de memoria que la derivada de x^3 es 3*x^2. pero si entenderlo y ser capaz de sacarlo tu mismo (como dice Igor: "estas cosas triviales se aprenden de la experiencia" XD)
o en quimica para igualar reacciones tambien hay unas normas basicas que hay que tener en cuenta como que haya el mismo numero de elementos antes y despues de la reaccion y cosas asi
lo que quiero decir es que tampoco tenemos que saberlo todo de memoria y vomitarlo en un examen, pero si es cierto que hay una mayor parte que es pura memoria.
De las casi 50 materias que tuve en la secundaria, solo recuerdo una profesora. Y ese es el único contenido que me acuerdo hoy en día, 10 años después. Nadie te enseña a pensar, y no es casualidad que la escuela sea tan parte del sistema como los medios de comunicación. Aprender a repetir cual loro, consumir información, consumir estética, consumir basura pasatiempista, comprar, comprar, comprar. Lo primero que hay que hacer para esclavizar a un pueblo, es quitarles la educación.
ResponderEliminarNada sorprende ya. Solo se trata de que haya gente que se de cuenta. La queja no es infructífera mientras exista.
Aprender, sólo se aprenden dos tipos de cosas: Las que a uno le gustan y las que uno cree que debe aprender.
ResponderEliminarAsí, podríamos decir que el profesor bueno es el que te convence (razonadamente, no digo yo que te hipnotice ni nada similar) de que lo que explica lo debes aprender. Pero escasean tanto los buenos profesores...
El primer día de clase suelen hacer presentación del palo: "la estadística es importante porque...". Pero de ahí, a que sea importante que yo sepa al subir al ascensor de la facultad que, si subo con otras 32 personas, hay un 33% de probabilidad de que superemos el peso máximo de 2500kg. ya hay un trecho, y si pretende convencerme de que la estadística la necesito para eso, ya me pongo a desconfiar de su estado mental. Porque, realmente, que la media de peso es 75 es un dato que se lo ha sacado de la manga, y que la varianza es 100^2 también. Además, siendo como es que allí nunca se junta tanta gente y que, si se junta, yo voy por las escaleras porque, aunque no lo parezca, no soy muy vago, sólo nos falta saber que si se superan los 2500kg (que repito que tanta gente tan apretada yo no creo que quepa), una alarma pita y hasta que no se baje suficiente gente, aquello no se mueve.
Que la estadística me sirve: por supuesto.
Que la estadística queda muy en entredicho cuando me intentan convencer de gilipolleces: más aún.
Sí es curioso sí, esto de los profesores.. Escasean y luego, a aquellos que nos han hecho interesarnos por su asignatura, los recordamos con fuerza e incluso con cariño. Muchas veces por eso me gustaría llegar algún día a ser profesora, para poder transmitir que sí es interesante, sí hay cosas bonitas en la enseñanza. Sólo hay que saber cómo hacer que tus alumnos sientan amor... y no necesidad
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